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Fenómeno de El Niño perturba capturas de Calamar de California

Fenómeno de El Niño perturba capturas de Calamar de California

El Niño continúa afectando a las capturas de Calamar a lo largo de la costa de California, que se ve especialmente en Monterrey, durante mucho tiempo un centro para la actividad pesquera y el consumo de pescados y mariscos, sostuvo el Monterey Herald.

“Una vez que El Niño apareció cosas empezaron a tener un aspecto diferente en la bahía”, dijo Sal Tringali, Presidente de Monterey Fish Company, que supervisa una flota de cinco barco que ofrece a restaurantes locales con la mayoría de sus pescados y mariscos frescos, incluyendo el Calamar.

No entrar en pánico; nuestra compartida “Serengeti del Mar” sigue siendo un hábitat prístino. Pero calentamiento de las aguas a lo largo de la costa oeste han cambiado el paisaje acuático – al menos por ahora. Por ejemplo, los pescadores de Calamar locales han resultado sus brillantes luces de barco porque la temporada es, básicamente, un busto.

No hay calamar,” dijo Tringali. “No hay anchoas tampoco. Hemos visto esto antes, durante El Niño”.

Es bastante típico de Calamar para seguir adelante durante un período de El Niño, según el profesor William Gilly, el experto en calamares de la Estación Marina Hopkins de Pacific Grove, a cargo de la Universidad de Stanford.

Vimos una caída de los desembarques en 1997-98 y nuevamente en 2009-10 (dos años de El Niño),” informó. Cada vez que la pesquería se recuperó con el regreso de la más familiar de La Niña.

Gilly apunta a una “bolla” en alta Mar anómala de agua más caliente (alrededor de 3 grados por encima de lo normal) que los científicos comenzaron a trazar realidad hace dos años. Esto hizo que el Calamar a moverse hacia el norte (en este caso), con los pescadores de aterrizaje escuelas tan lejanos como Sitka, Alaska.

La creciente demanda en China, Japón, México y Europa ha impulsado los precios y lanzó un frenesí de pesca por valor de más de $ 70 millones al año. El acto de desaparición es una preocupación para los pescadores, a los mayoristas como Tringali y a los dueños de restaurantes tales como Kevin Phillips, que sirve a más de 1,000 libras de Calamar fresco cada semana de Abalonetti Bar and Grill en el muelle de pescadores.

Abalonetti ha construido una reputación de renombre tales como un restaurante calamares que Phillips contrata a un empleado a tiempo completo para limpiar los calamares y el vestido en una pequeña habitación detrás del restaurante.

“No hemos acabado todavía”, dijo Phillips. “Cuando Monterey Fish Company está baja, se obtiene la última, entonces tenemos algunas otras fuentes para la costa oeste de Loligo.”

Phillips se esfuerza por mantener la calidad de los calamares servido en Abalonetti, y no es tímido sobre revelar pequeño secreto sucio de la industria: “Muchos restaurantes locales, junto con la mayor parte del país, están utilizando la Bahía de Monterey Calamar procesado en Asia”Ha detto. “Viene listo para usar.”

Gran parte de la pesca local – el 90 % de los 230 millones de libras aterrizó cada estación a lo largo de la costa de California – se congela, enviado a China, no congelado, procesado, vuelve a congelar, empaquetado y enviado de regreso a Estados Unidos como parte de un viaje de 12.000 millas que deja una huella de carbono gigante. Es una verdadera calamar California, y más barato y conveniente, pero el proceso no puntúa alto en las categorías de frescura y sostenibilidad.

Cuando usted es dueño de un restaurante, y los clientes crear una voraz demanda de calamares, algunos sacrificios deben hacerse – especialmente durante El Niño.

Mi primera opción es el Calamar capturado locales y limpiarse aquí,” dijo Sam Mercurio de Domenico en el muelle. “Cuando el Calamar se están ejecutando fuerte Fish Monterey dejarán de lado parte de su volumen y congelarlo durante años más lentas. También miramos a la costa este, pero el Calamar no es más grande, más dura y no tan dulce. Siempre estoy buscando el mejor producto, no el más barato. Estoy tan exigente, si no me gusta lo que veo que lo envíe de vuelta”.

Un pescador sí mismo, Mercurio se basa en su relación con sus compañeros para abastecer su restaurante de mariscos.

 

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