Directora de SANIPES renunció pero dejó huellas que se debe investigar

Diana del Carmen García Bonilla, quien acompañó al mandatario Pedro Pablo Kuczynski (PPK) en su viaje a China, renunció al cargo de Directora ejecutiva del Organismo de Sanidad Pesquera, SANIPES, ante una inminente denuncia de maltrato a su personal y presuntas sobrevaluaciones en compras.

La susodicha, caracterizada por humillar, vejar y maltratar a funcionarios de carrera, sin importarle edad ni género, venia burlándose de la publicación de unos audios con sus acostumbradas frases denigrantes que la pintan de cuerpo entero; pero ante lo evidente, no le quedo más que poner su cargo a disposición e irse sin pena ni gloria. Pese a ello, el Gobierno le da las gracias por los servicios prestados; vaya, dar las gracias por ofender y humillar?

Ayer 29 de noviembre, fecha que muchos funcionarios del SANIPES celebrarán como aniversario de la independencia del yugo de esta “negrera verbal”; el Vicepresidente Martín Vizcarra y el Ministro de la Producción, Bruno Giuffra, aceptaron la renuncia a García Bonilla a la jefatura del SANIPES. Pero que es lo que motivó su dimisión?.

Nada menos que la existencia de dos audios, en los que se comprueba lo que era secreto a voces, la vejación a funcionarios, incluso remarcándoles que a ella no le interesa la meritocracia a la hora de subirles los sueldos. Bajo ese concepto, pues no sabemos cómo llegó la susodicha a ocupar ese cargo. Solo basta escuchar como la fémina demuestra su desprecio por la meritocracia y a la denominada Ley Servir. “Para mí no hay doctorado, no hay maestría, no hay nada, la gente de mi confianza gana lo que gana porque yo soy la que lidero”.

En otro audio, agrega con una precisión fuerte “La persona que me hace mal, no sé por qué, peeeero es una energía que yo tengo, o se muere, o se enferma, o le va muy mal en la vida, siempre te lo he dicho, ¿o no?…”, dice en tono amenazante a un funcionario.

Durante el tiempo de haber mantenido “maniatado” al SANIPES, colocando funcionarios a su antojo, gente de su entorno, personal, amical y hasta familiar, fue un calvario para los trabajadores con años de labor, que tuvieron que soportar las humillaciones de la mujer, para no ser despedidos o bajados de nivel, y pese a las quejas contra ella, ninguna llegó a prosperar, por no existir pruebas que la incriminen. Ser agresora verbal en su centro de labores, no ha sido su única “meritocracia”, también se ha desempeñado como violadora de los Derechos Humanos, normas y reglamentos, pues hace un par de años, fue intervenida por conducir ebria y puesta a disposición de la policía.

Lo cierto es que la sonrisa se le fue de la boca, cuando tuvo conocimiento de los audios, y cueste o no, estos la tumbaron. Asumimos que le costará mucho hacerse de otro cargo, pues en la mayoría de las instituciones públicas, cuenta la meritocracia, pero como a ella poco y nada le interesa, tendrá mucho tiempo para empezar a subir el peldaño de la mediocridad, porque tampoco ahí había llegado.

Al cierre de esta nota periodística, fuentes extraoficiales manifestaron que tras la salida de Diana del Carmen García Bonilla, quien se habría hecho cargo de esta institución momentáneamente es Héctor Soldi Soldi, actual Viceministro de Pesquería.