PERU PESQUERO con agallas para denunciar…
Con la información de: Expreso.com.pe
El Gobierno del Presidente Ollanta Humala ha establecido que el 2016 se denomine el “Año de la consolidación del Mar de Grau”, lo cual nos parece acertado por tratarse de uno de los más importantes héroes del país. No obstante, más sincero sería darle a ese significado la correspondiente deferencia con hechos, resultados prácticos y actos concretos de reconocimiento a nuestra soberanía y a tan insigne, histórico y valiente personaje.
En principio, hablar del Mar de Grau es referirnos a un tema amplio, profundo y complejo, donde no solo entra a tallar el episodio histórico de la Guerra del Pacífico, sino que tiene que ver fundamentalmente con el presente, con nuestra soberanía marítima y con la ingente despensa de recursos marinos que existe dentro de las 200 millas pero que cada día es depredada a vista y paciencia de las autoridades.
Al respecto, como bien lo ha anotado el Presidente del Frente Nacional de la Pesca, Roberto Vieira, el “Año de la consolidación del Mar de Grau” no debería ser en el fondo una broma de mal gusto o una burla del actual Gobierno para con todos los peruanos, y en especial para todos aquellos -marinos, pesqueros, armadores, pescadores artesanales y hasta surfistas- que de una u otra forma interactúan en nuestro litoral.
Reiteramos, se requiere más sinceridad y no la generación de noticias efectistas como lo que ha hecho Palacio de Gobierno con la reciente denominación impuesta a este nuevo año. Porque eso es lo que protagonizó el humalismo el día en que la Corte Interamericana de Justicia, con sede en La Haya, hizo público al evacuar el fallo en el juicio que le entablamos a nuestro vecino del Sur. Es cierto que dicho tribunal nos da en el papel más mar pero, en términos prácticos, regiones como Moquegua o Tacna no fueron reivindicadas en ese veredicto, por lo que nuestro triunfo no resultó como el que realmente se esperaba.
Sin embargo, el Presidente Humala abrió las puertas del Patio de Honor de la Casa de Pizarro para darse un baño de popularidad, pero jaloneado por las entonces activas bases nacionalistas traídas desde provincias y que en realidad actuaron como una gran portátil. En consecuencia, que esta administración no le venda humo a la ciudadanía y que más bien trate de luchar virilmente en la defensa de nuestra soberanía dentro del marco del derecho internacional y también de cara a nuevos problemas como el creciente narcotráfico que ha encontrado en nuestros puertos, costas y extensas áreas del Océano Pacífico -frente al Perú- sus mejores aliados para sacar anualmente toneladas de droga.
Hay que honrar al gran Miguel Grau y en su persona a todos los héroes de la Guerra del 79, hay que honrar a ese inmenso Mar tan rico en peces y en otros recursos marinos, pero al que lamentablemente desde esta administración gubernamental se le ha abandonado más que en cualquier otra, porque hay zonas de ese Mar que son tierra de nadie y donde enormes flotas de países extranjeros le sacan la vuelta a la ley o los carteles de la droga corrompen autoridades para poder transportar alegremente clorhidrato de cocaína rumbo a los cinco continentes.
Finalmente, en comparación con otros países pesqueros como el nuestro, la población peruana es la que menos consumo per cápita tiene de pescado, por eso defendamos de verdad la soberanía marítima de nuestro país, y no hay tiempo que perder.
