Ica: Secado ilegal de pescado en pampas revela ineficaz fiscalización de Produce

La ineficiencia es el común denominador de la incapacidad, pero también va de la mano con las irregularidades, las mismas que benefician a cuantos en perjuicio de tantos; tal vez por ello es que la llamadas autoridades del Ministerio de la Producción, principalmente de la Dirección General de Supervisión, Fiscalización y Sanción del Despacho Viceministerial de Pesca y Acuicultura, se mantienen de espaldas ante la sobredimensionada explotación de la Anchoveta, que en su mayor porcentaje de capturas, son destinados con total desparpajo y en las narices de los fiscalizadores, a las plantas ilegales para hacer harina; cuando deberían ser dirigidas para el Consumo Humano Directo, CHD.

Los cuestionamientos a los funcionarios de esta dirección, encargados de fiscalizar el sector más importante no se han hecho esperar; igual, las denuncias de graves irregularidades que como una inmensa bola de nieve, pueden acabar con una avalancha sobre la cabeza de José Romero Glenny, quien dicho sea de paso, nadie se explica por qué a la fecha no ha sido removido del cargo, pues su gestión, es considerada la más nefasta.

Cada región pesquera tiene un problema que resolver y una queja que absolver; sin embargo, hasta el momento no se oye menos se escucha la voz del Produce. Ica es una de ellas, donde los recursos naturales son un gran potencial para su actividad pesquera artesanal, pero la captura de Anchoveta destinada a la harina, ha llevado al caos ésta región sureña, al punto que se han instalado un aproximado de 13 “plantas de harina de pescado” y residuales en la zona de San Andrés, especialmente en los fundos San Luis, Milagritos y Pampa de Ocas, todas ellas sin autorización ni permisos, pero avaladas por el silencio cómplice de quienes deberían sancionarlas y paralizarlas.

Asimismo; en esta zona existen un centenar de actividades de secado en pampa de residuos de Anchoveta y otros recursos pesqueros, mismos que están en procesos descomposición y que a pesar de ser totalmente ilegal, ilícito y lesivo para el medio ambiente y la salud pública, porque no solo ocasionan fuertes olores desagradables y proliferación de microorganismos, focalizando puntos generadores de contaminación, además de que dicho proceso no ofrece ninguna garantía de calidad sanitaria para que este producto sea utilizado como alimento balanceado, el Produce brilla por su ausencia.

La Ley establece: El secado a la intemperie de residuos sólidos es una actividad que por sus implicancias ambientales sanitarias negativas constituía una infracción administrativa tipificada en el Decreto Supremo 017-2017-PRODUCE que aprueba el Reglamento de Fiscalización y Sanción de las Actividades Pesqueras y Acuícolas (numeral 70) entonces por qué Produce y la Dirección General de Supervisión, Fiscalización y Sanción del Despacho Viceministerial de Pesca y Acuicultura, se mantienen sordos, ciegos y mudos, frente a estos hechos delictuosos que desacreditan ese cacareado trabajo de fiscalización en el sector pesca publicitado por Romero Glenny.

En este escenario, llenó de descontentos y desilusiones en la población, esa amenazadora bomba de sublevación podría activarse y derribar a este alicaído gobierno, que a gritos pide salvavidas a quienes a través de normas enredadas y funcionarios incompetentes maltrata sin el menor escrúpulo.

El Presidente Martín Vizcarra parece no haber entendido que la pesquería peruana, al ser la segunda fuente generadora de alimento, empleo y divisas a nivel nacional, necesita recobrar su autonomía como Ministerio de Pesquería y estar dirigido por técnicos, científicos y expertos pesqueros. La presencia de marinos en retiro en un sector para profesionales pesqueros en vez de sumar resta.